Cómo implementar un sistema de gestión de almacenes

Cómo implementar un sistema de gestión de almacenes

Los sistemas de gestión de almacenes (WMS) han estado disponibles ya que los primeros sistemas informáticos permitieron la funcionalidad de ubicación de almacenamiento simple. Hoy, los sistemas WMS pueden ser independientes o parte de un sistema de planificación de recursos empresariales (ERP) y pueden incluir tecnología compleja como identificación de radiofrecuencia (RFID) y reconocimiento de voz. Sin embargo, el principio básico del sistema de almacén ha permanecido lo mismo, para proporcionar información para permitir un control eficiente del movimiento de materiales dentro del almacén.

Selección de proveedores de sistemas de gestión

Al seleccionar un WMS, hay muchos proveedores para elegir. Si actualmente opera un sistema ERP, entonces la funcionalidad WMS puede ser parte de esa suite, o puede usar un paquete WMS Bolt-On WMS. Para las empresas que usan las mejores soluciones de reproducción, la elección de WMS reflejará los requisitos de sus operaciones de almacén.

La implementación de un WMS a menudo es compleja. La planificación del proyecto es fundamental para el éxito de cualquier implementación de WMS. El proyecto requiere recursos de almacén para recopilar datos sobre el almacén físico, los materiales y el inventario, así como la definición de las estrategias necesarias para operar el almacén. Existe el desafío adicional de implementar el sistema mientras aún funciona el almacén. Un factor importante de todos los proyectos es seguir enviando productos mientras se implementa el WMS.

Implementación de WMS

La complejidad de una implementación de WMS varía con cada negocio. Las dimensiones físicas y las características de cada elemento que se almacenarán en el almacén deben recolectarse e ingresarse en el nuevo sistema. Los cálculos de capacidad requieren el tamaño físico y el peso del artículo almacenado, así como las dimensiones de todos los contenedores o bastidores de almacenamiento en el almacén. Se requieren las opciones de almacenamiento para cada elemento, por ejemplo, si el elemento se puede almacenar por separado, en una caja, paleta o si se puede apilar. Cada artículo debe revisarse para ver si tiene limitaciones físicas en su almacenamiento, como requerir refrigeración.

Se debe recopilar información de material peligroso para que el artículo no esté almacenado en ciertas áreas. Esta información es solo parte de los requisitos de la implementación de WMS. El sistema requiere decisiones sobre la configuración que se tomarán sobre cómo se deben colocar o eliminar los elementos del sistema, en qué orden, para qué tipos de materiales y qué métodos de colocación y eliminación deben usarse.

La implementación requiere un aporte significativo de los recursos que operan el almacén en el día a día y esto puede ser una tensión en las operaciones de almacén. Un proyecto exitoso reconocerá este hecho y se asegurará de que el personal clave requerido para la implementación tenga una copia de seguridad adecuada para que las operaciones de almacén no sufran.

Después del lanzamiento del sistema de gestión de almacenes

Después del lanzamiento exitoso del sistema WMS, muchas empresas encontrarán que los recursos necesarios para operar el sistema son mayores que antes de la implementación. Esto se debe principalmente a la naturaleza intensiva en datos del software y al hecho de que los almacenes están en un estado de flujo; Los bastidores se mueven, se cambian las estrategias de colocación y eliminación, nuevos elementos agregados, se desarrollaron nuevos procesos.

La precisión del almacén es primordial para que el software funcione y, para hacerlo, deberán ingresar los datos con precisión y de manera oportuna. Aunque la mayoría de las implementaciones de WMS reducirán los costos de mano de obra en la colocación y eliminación de materiales, a menudo se requiere una función de gestión de almacenes adicional solo para operar el software.

A pesar de la complejidad, los sistemas WMS ofrecen a las empresas beneficios considerables. Los tiempos del ciclo de colocación y eliminación no solo se reducirán, sino que se mejorará la precisión del inventario. Esto se suma a una mayor capacidad de almacenamiento, un mayor almacenamiento organizado de materiales y una mayor flexibilidad de las operaciones de almacén.